Casi a diario y en muchos ambientes escucho historias de terror de empleados profesionales y capaces que viven la pesadilla de tener un jefe o director de área adicto a la microgerencia. Dejando de lado la existencia de la gerencia deficiente que produce ese tipo de actitudes, mi reacción frente a ellas es de absoluto desprecio y añado que es una de las pocas cosas que me puede hacer perder la cabeza. En ocasiones puede ser una actitud aprendida en casa, en ocasiones puede ser simple desconfianza o arrogancia, y en todos los casos es abrasivo y puede hacer que los mejores elementos de una organización o bien no exploten su potencial o bien se vayan frustrados y tristes. Creo firmemente que si no se parte de una premisa de respeto por el otro, sus capacidades y su criterio, será imposible llegar a tener una organización innovadora y capaz de aprender. Un mecanismo sencillo de detectar un micro gerente es simple: Entre más pequeño es el detalle que alguien quiere controlar, más lej
Experiencias en innovación y gerencia del mercadeo digital. Blog oficial Carlos Mauricio López Londoño.